BUROFAX

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Mástil de bandera girado 180º y clavado en el suelo
Mástil de acero, altura 2,30 m y base ø 30 cm

Un crítico de arte mintió en EL Cultural del periódico El Mundo, al decir que una de las obras invisibles presentes en la exposición de Karmelo Bermejo en el museo MARCO Vigo no existe. La pieza sí existe, aunque no se ve. El Burofax enviado a la dirección de El Cultural exige legalmente al suplemento rectificar la información
«Podemos sonreír ante la imposibilidad de un mástil de bandera girado 180 grados y clavado en el suelo, máxime cuando resulta fácil comprobar su falsedad en una esquina sin cámaras ni vigilancia.» David Barro. Karmelo Bermejo, punto y seguido. EL CULTURAL, pag 36 , 21 de octubre de 2011.


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Muy señores míos.
En relación a la información publicada por ustedes en su edición impresa de EL CULTURAL del 21 de octubre de del 2011 (página 36, copia adjunta) titulada «Karmelo Bermejo, punto y seguido»,
MANIFIESTO:
a). Que ustedes carecen de base documental o prueba alguna para afirmar que la cartela técnica de la pieza «-0. Mástil de bandera girado 180º y clavado en el suelo», expuesta en el Museo MARCO Vigo, contenga alguna información falsa. La cartela técnica de la pieza contiene la siguiente información verídica «Mástil de acero, altura 2,30 m y base ø 30 cm». La pieza se encuentra en estos momentos expuesta en la sala 1 del Museo de Arte Contemporánea de Vigo por lo que resulta evidente comprobar la veracidad del texto científico aportado en la cartela e indudable por lo tanto la falsedad de la información transmitida por David Barro que dice textualmente «Podemos sonreír ante la imposibilidad de un mástil de bandera girado 180 grados y clavado en el suelo, máxime cuando resulta fácil comprobar su falsedad en una esquina sin cámaras ni vigilancia». La acusación de David Barro implica que el dinero público destinado a la producción de esta pieza habría sido destinado a otra cosa y por esto resulta inadmisible.
b). Que la citada información podría ser constitutiva de un delito de calumnia, y un libelo según recoge la legislación española.
c). Que la imagen de un colectivo profesional, la de los trabajadores del museo y la de un trabajador externo al museo, el artista, resulta lesionada por su información.
d). Que la citada publicación no supone un «hecho informativo», por cuanto que ustedes carecen de información contrastable sobre este hecho, y que no se persigue un «interés informativo» o un «interés general», sino denigrar la imagen de un colectivo profesional ante la opinión pública y crear un «estado de opinión» contra este colectivo y este trabajador en concreto.
FUNDAMENTOS DE DERECHO:
El derecho al honor, intimidad personal y familiar, y propia imagen está recogido en el art. 18.1 de la Constitución española y, además, se establece como límite al uso de la informática (18.4) y a la libertad de expresión e información (20.4). Como derecho fundamental incluido en la sección 1ª, del capítulo segundo, del Título I, es un derecho con efecto directo (no es necesario ley que lo desarrolle) y especialmente protegido por la posibilidad de recurso de amparo (53.2). Se trata, por tanto, de un derecho más importante para la Constitución que, por ejemplo, el derecho a la propiedad.
El legislador ha desarrollado, no obstante, este derecho fundamental y ha pergeñado un triple esquema de protección, de menor a mayor gravedad. Por un lado, la víctima dispone del DERECHO DE RECTIFICACIÓN (Ley Orgánica 2/1984, de 26 de marzo, reguladora del Derecho de Rectificación.) que básicamente consiste en el derecho que tiene el afectado a que el medio de comunicación que haya difundido una información errónea publique un escrito suyo en el que rectifique y matice la información.
Más importante es el segundo nivel de protección, la Ley Orgánica de Protección civil del derecho al honor, intimidad personal y familiar, y propia imagen. La ley establece una serie de intromisiones ilegítimas (art. 7) frente a las cuales cabe una suspensión cautelar de la intromisión y, en su caso, una indemnización monetaria. La ley también establece una serie de excepciones en la aplicación de la ley, la más importante de las cuales es la del consentimiento.
Por último, para los casos muy graves, el Código Penal tiene previstos los delitos de calumnia e injuria.
Sentado esto, el art. 18 de la Constitución distingue, y así lo entiende también la doctrina, tres tipos de derechos: honor, intimidad e imagen. La crítica a los mismos debe, por tanto, ser una crítica separada.
a) Derecho al honor: El derecho al honor suele interpretarse desde una doble perspectiva. Por un lado, la perspectiva social del honor vendría a ser la imagen que los demás tienen de nosotros; por otro, la imagen personal del honor, coincidiría con una suerte de autoestima. Así mismo, las violaciones al honor pueden venir por una doble vía, a través de la imputación de hechos falsos a un individuo o el descubrimiento de hechos ciertos pero sobre los que no exista un interés legítimo de conocimiento.
Combinando la doble concepción del honor con la doble violación del honor obtenemos cuatro resultados: la imagen social del individuo queda menoscabada por un hecho falso (por ejemplo, que a alguien le acusen de ladrón sin serlo), la imagen social del individuo queda menoscabada por un hecho cierto pero que denigra su status (en ciertas sociedades que se desvele que practica el adulterio), la autoestima del sujeto cae por la imputación de hechos falsos (depresión subsiguiente a falsas acusaciones), y la autoestima del sujeto se reduce por un hecho cierto (ha entendido que ha obrado mal y se avergüenza)
Por su parte, la tercera posibilidad (caída de la autoestima por imputación de falsos hechos) tampoco resulta en exceso intrincada. El peligro para no reconocerlo es confundirla con la primera posibilidad.
La caída de la autoestima no se produce porque la sociedad se ha creído unos hechos falsos (en cuyo caso, entraríamos en el primer caso), sino por el simple hecho de oír una determinada falsedad. En realidad, esta posibilidad podemos incluso concluir que no existe. Si a mí alguien me acusa de algo absolutamente falso, y nadie más lo oye, yo podré molestarme de la mala fe del otro, pero mi autoestima no caerá en absoluto (ya que sé que es falso). Queden como conceptos legalmente reconocidos los siguientes:
Calumnia
La calumnia consiste en la imputación falsa a una persona de la comisión de un hecho que la ley califique como delito, a sabiendas de que éste no existe o de que el imputado no es el que lo cometió.
Difamación
La difamación es la comunicación a una o más personas con ánimo de dañar, de una acusación que se hace a otra persona física o moral de un hecho cierto o falso, determinado o indeterminado, que pueda causar o cause a ésta una afectación en su honor, dignidad o reputación.
Libelo.
(Del lat. libellus, librillo, escrito breve). 1. m. Escrito en que se denigra o infama a alguien o algo.
EXIGIMOS:
1. Contestación por escrito de este documento.
2. QUE SE EJERZA MI DERECHO DE RECTIFICACIÓN CONFORME A LA LEY ORGÁNICA 2/1984 Y SE PUBLIQUE EL SIGUIENTE ESCRITO DE RECTIFICACIÓN QUE ADJUNTAMOS COMO DOCUMENTO-1. TENIENDO PARA SU PUBLICACIÓN , EL PLAZO DE TRES DÍAS.
3. QUE LAS ENTIDADES JURÍDICAS Y FÍSICAS «UNIDAD EDITORIAL S.A.», «UNIDAD EDITORIAL INTERNET S.L.U.», «DIARIO EL MUNDO», «PRENSA EUROPEA S.L.», «EL CULTURAL ELECTRÓNICO, S.L. «, «EL CULTURAL» Y SU DIRECTORA, Dña. BLANCA BERASÁTEGUI PUBLIQUEN EL CONTENIDO DE ESTE ESCRITO EN TODOS SUS MEDIOS IMPRESOS Y DIGITALES.
De no producirse la correspondiente RECTIFICACIÓN, y sin menoscabo de ello, EMPRENDEREMOS LAS ACCIONES LEGALES QUE CONSIDEREMOS OPORTUNAS CONTRA TODAS LAS ENTIDADES FÍSICAS Y JURÍDICAS ARRIBA MENCIONADAS.
KARMELO BERMEJO.
Documento 1.
La obra de arte «-0. Mástil de bandera girado 180º y clavado en el suelo» de Karmelo Bermejo, es auténtica, debajo de la base del mástil se encuentra el propio mástil que fue adquirido con dinero público y que atraviesa el pavimento del museo. La realización de esta pieza ha supuesto un esfuerzo enorme del artista y de los trabajadores del museo en lo que a producción e instalación se refiere, más allá de la propia concepción de la idea. El estudio previo escrupuloso de todos los planos del edificio con el objetivo de encontrar un eje que atravesar sin que el mástil dañase la estructura arquitectónica del museo ni su infraestructura de conducciones de aire, luz y agua, constituyó una labor de ingeniería milimétrica realizada con absoluta precisión y que ha sido realizada con una profesionalidad sobresaliente. La detección de las posibilidades del ancho y el alto de la perforación fue realizada con el mismo detalle analítico que la resolución técnica del problema de horadar el suelo.

83 responses to “BUROFAX

  1. Aportación de Karmelo Bermejo a la definición de «tonto» en el diccionario de la RAE (significado 3)
    tonto, ta.
    (De or. expr.).
    1. adj. Falto o escaso de entendimiento o razón. U. t. c. s.
    2. adj. coloq. Que padece cierta deficiencia mental. U. t. c. s.
    3. David Barro (adjuntar retrato para ilustrar la idea)

  2. y qué más da!
    acaso forma parte de la función de los críticos buscar LA verdad?
    karmelo, mejor que haber emprendido acciones legales con todo el mal rollo que supone… haberte mejor descojonado de la risa y ya está!
    cuanta preocupación!
    endevé

  3. El arte gana a la hijo putez estúpida y soez, de manera brillante y hasta legal, enhorabuena karmelo bermejo.

  4. Cabe cuestionarse por qué David Barro hace en su artículo una afirmación de ese tipo. En primer lugar por el grado de riesgo que implica decir que el mástil no está realmente girado 180 grados. Y en segundo lugar por qué dice eso de «en una esquina sin cámaras ni vigilancia». Respecto a lo primero no parece razonable arriesgarse asi de modo gratuito. Dicho esto no sería de extrañar que el señor David Barro ante la ausencia de cámaras y en un momento en que no hubiese nadie vigilando el lugar en el que está ubicada la «base ø 30 cm» la haya levantado y comprobado la falsedad de la afirmación de la cartela «-0. Mástil de bandera girado 180º y clavado en el suelo».
    ¿Por qué menciona la esquina sin vigilancia?

  5. ¿Y si el crítico de arte tuviera razón y se hubiera limitado a decir que el emperador está desnudo? Al menos Sierra cuanta con fotografías…
    Después de todo Karmelo se limita a afirmar que el crítico no lo puede demostrar… Pero bueno, yo no puedo demostrar la existencia del Dios judeocristiano y estoy seguro de que no existe.

  6. Claro, Valentín y Sócrates, Barro conoce bien los intríngulis del Marco, lo que allí dentro se monta o se deja de montar, y si ahora se retracta es únicamente por cortesía hacia Iñaqui Antelo y Agar Ledo, no sin antes recordarles que han cometido un error al ofrecer cobertura institucional (por muy periférica y carente de presupuesto que esta sea) a un oportunista cuyo único interés reside en ser una opción de mercado económica y desinformada para aquellos que no pueden pagarse un auténtico Santiago Sierra, o prefieren imaginarse un Santiago Sierra reaccionario y sumiso.
    Estoy seguro de que Barro se ha quedado satisfecho con la clara lectura del subtexto de su nota en El Mundo, esto es, afirmar claramente que la fecha de caducidad de Bermejo ya ha llegado… estos artistas de usar y tirar que El Mundo fabrica ( y Barro como cómplice veterano lo sabe bien) cada vez deben durar menos.

  7. Vaya cagada lo de David Barro ¿no? ¡Manosea las obras de arte en los museos sin que nadie le vea! -¡que chulo es!- Diagnostica que son falsas y con su habitual ojo clínico falla en el pronóstico y resulta que son verdaderas.Y este lleva una coleccion de pintura imaginaros!

  8. Resulta que es verdadera, pero el «experto en arte contemporáneo» va y escribe que es falsa! Patético. Ese tio no es experto en nada, es un charlatán, demostrado queda.

  9. Que un artista, sea quien sea, se vea en la obligación de tener que enviar un BUROFAX a la crítica que se supone que se ha interesado por su obra, es absurdo y deja en evidencia el desatino y la chulería de David Barro.
    Lo que sucede aquí es que su «culta y rigurosa» opinión es demostrable y ha dado con Karmelo Bermejo..mala suerte David Barro..que no hable de lo que no sabe.
    Un poco de respeto.

  10. Parece evidente que el bueno de David Barro ha dado un patinazo. Karmelo Bermejo es un artista que está sobresaliendo claramente, desde hace unos años, por méritos propios. Una cosa es una crítica rigurosa de una obra y otra muy distinta es deslegitimar y echar por tierra amparándose en la mentira facilona. España es sin duda es el país de la envidia, si sacas un poco la cabeza y muestras talento, alguien llegará a intentar cortartela. No se hasta que punto este David Barro no es un aprendiz de Robespierre…

  11. Flaca respuesta sería esa además de limitadita..¿no requiere un poco más de respeto?? entonces, ¿para qué sirven sus textos, su revista, su crítica, sus exposiciones, sus asesorías? yo de sus comentarios ya no me creo nada de nada.

  12. Según mi opinión lo que hace que esta muestra sea redonda (como un punto) es que K. Bermejo ha conseguido revisar la idea barroca de ‘lo no visible’, esto es: poner el foco de atención en la importancia de mirar más allá y no fiarse de las primeras impresiones. Y D. Barro ha caído en la primera trampa del juego, como un parvulario.
    Además, las comparaciones con S. Sierra son cansinas y de uso fácil. Chico, ¿no se te ocurre otra forma más creativa de atacar a K. Bermejo? Fíjate en las diferencias de fondo de sus trabajos más que en las similitudes formales. Ambos hablan el mismo lenguaje pero dicen cosas muy distintas.
    Y más de lo mismo con el tema de la crítica a la institución. Habría que preguntar a K. Bermejo pero tal y como yo lo veo, el discurso del artista va más allá de esa primera capa de lectura, si utiliza como elementos significativos para crear su discurso los elementos relacionados con la institución es porque son los que tiene más a mano.
    En definitiva, está claro que D. Barro ha ido a joder a K. Bermejo pero lo que no se esperaba es que le saliese ‘la bandera por el culete’ vía burofax. Se lo tiene merecido.

  13. Si la empresa «David Barro» se hubiese encargado del catálogo, el transporte de las piezas, y la gestión en general de la exposición la crítica habría sido buenísima y «todo» sería súper auténtico, ¿a que sí?
    Como decía George Orwell: «Dale el poder a los cerdos y verás qué pasa»

  14. En mi nombre, David Barro, y el de El Cultural, queremos pedir disculpas al artista Karmelo Bermejo por el error cometido en la crítica de su exposición en el MARCO de Vigo cuando se dice que el mástil de bandera girado 180 grados y clavado en el suelo es falso cuando efectivamente su existencia es verdadera. Por lo cual procedemos a retirar la frase del texto de la crítica. DB

  15. La obra de Karmelo Bermejo solo tiene interés, por la polémica que ha propiciado la rápida mirada del crítico David Barro. Habría que señalar que existen muchos ejemplos de ocultamientos, de no presencias en las prácticas artísticas contemporáneas, y más, aún en el arte conceptual. Las referencias que maneja Karmelo se “hacen” contemporáneas a través de la presencia e influencia del museo, y más en un contexto deficitario como el nuestro. En un debate y discurso exigente, esta obra pasaría a ser un chiste de estudiante de Bellas Artes de segundo curso; mirado, incluso, con cierta reprobación por sus propios compañeros. Deberíais saber que esta obra es deudora de “Vertical Earth Kilometer”, 1977 de Walter De María; un cilindro de un kilómetro de longitud “clavado” e introducido en la Friedrichplatz de Kassel. El visitante solo ve el circulo/canto de dicho cilindro y tiene que creer que está y que se produjo dicha perforación, no pudiendo “comprobar”, como en el caso de Karmelo, que el mástil está verdaderamente clavado en el primer piso del museo. Ahora bien, qué paso por la mente de David Barro?; pues que Karmelo había puesto un chapón en el suelo y al carallo; y esa ocurrencia la quiso desmontar y le salió el tiro por la culata. Pero eso no quita que la pieza de Karmelo sea una obra demasiado deudora, simplona y hasta aburrida, pero ya se sabe…en un país de ciegos, el tuerto es el rey.

  16. Por la culata? Patinazo? Cagada? Señoras aun estamos a tiempo de que el señor David Barro publique una foto con un mastil de 30 cm. Entonces que?
    Parece bastante lógico que habiendo sido un trabajo rigurosisimo de calculo (tanto como la elaboracion de las ideas) una foto del montaje nos saque de dudas a todos. Pero no, mejor un BUROFAX. Todavia hay tiempo. Alguien sabe si David Barro realmente ha pedido disculpas o tiene intencon de hacerlo? De momento la respuesta del BUROFAX parece un buen farol. Esperemos que ahora si haya 2,30 de mastil clavado porque si no, no solo será el Bermejo el denigrado, sino tambien algo con mas credito como el MARCO de Vigo y sus gestores.
    Ya tengo en casa las palomitas…

  17. Veo una disculpa por parte de David Barro en este foro, lo cual no me parece un mal gesto por su parte pero…no es del todo serio contrarrestar el daño ocasionado a un artista, que se ha visto difamado en el diario «El Mundo» con una simple disculpa en este foro. Intuyo que David Barro es una persona adulta y profesional, por lo tanto debería plantear publicamente su recticación en las proporciones que ocasionó el daño, de otro modo entiendo que sólo busca aplacar el vendaval que se le viene encima. La honestidad honra y premia a la persona, las lágrimas de plañidera pasan factura tarde o temprano, como un efecto boomerang.

  18. Aquí la cosa está clara, la pieza existe tal como está descrita en la cartela. Se puede comprobar de diferentes maneras, una de ellas llamando al Marco y consultando con alguno de sus comisarios o, si vais a Galicia, acercándoos al Marco y en esa «esquina sin camaras ni vigilancia» levantar un poco la pieza (esto a mí particularmente no me gusta nada porque si se hiciese con todas las obras que se presentan y en las que hay que creer al artista, uf, sería poco serio).
    Bueno, vamos a ver, yo creo de debemos entre todos desenmascarar a este tipo de pseudocomisario-crítico-editor-transportista-montador y responsable, o ex responsable,ya no sé, de compras de la fundación Barrie de la Maza. En Madrid (y Lisboa) me han contado cosas que se podrían comprobar fácilmente. Una de ellas fue cuando este señor ejerció de director de la feria de arte de Vigo, y simultáneamente de comprador para la mencionada fundación. Él se encargó de hacer el catálogo de la feria, conseguir azafatas,(por cierto creo que las azafatas en realidad eran estudiantes de un máster de historia del arte a las que no pagaron un duro en concepto de «prácticas no remuneradas»), etc.
    Con las galerías el tema era el siguiente: Tú vienes a la feria y yo te compro algo, si no te lo compro ahora porque no me llega el presupuesto pues te lo compro después.
    Otra posibilidad, tú me encargas un catálogo de alguno de tus artistas y yo te compro algo, además incluyo hablar bien de tus artistas en mis críticas.
    Resumiendo: La crítica de arte objetiva y rigurosa es incompatible con intereses compartidos de tipo comercial-editorial.
    Vamos, que Al Capone estaría muy orgulloso de este individuo.

  19. Absolutamente deacuerdo con Si el cultural se pretende a sí mismo como una revista de cultura y arte independiente no puede tener entre sus críticos a personas que utilizan el medio para favorecer a otras empresas propias del mismo gremio. Es exactamente igual que si hubiera un galerista escribiendo en EL Cultural. Es bochornoso.

  20. Absolutamente deacuerdo con Indignados Si el cultural se pretende a sí mismo como una revista de cultura y arte independiente no puede tener entre sus críticos a personas que utilizan el medio para favorecer a otras empresas propias del mismo gremio. Es exactamente igual que si hubiera un galerista escribiendo en EL Cultural. Es bochornoso.

  21. Indignados, dile ahi a Karamelo que cuelgue de una vez la foto del montaje, y después hacemos piña todos contra Barro, ese malaje.
    Pruebas, por favor, si no esto huele a fraude y drama queen adolescente.
    Queremos ver un enorme mastil de dos metros treinta, el estudio arquitectónico autorizado, fotos del montaje en secuencia y un ensayo de Castro Florezz diciendo que la pieza es muuuu güena.

  22. Tanta incredulidad desafortunada no merece comentario, pero en algo te daré la razón: Aún hay tiempo, sí.
    Hay tiempo para que críticos como David Barro sigan diciendo lo que les dé la gana gracias a una posición ganada no se sabe muy bien cómo.
    Hay tiempo para que monten una editorial y sigan publicando entrevistas y reportajes de tercera. Hay tiempo para que se rodee de «personajes» que ponen un precio muy bajo a su existencia por codearse con gente como ellos y bajar así el listón de la mediocridad.
    Hay tiempo para que siga haciendo exposiciones de obras de sus amigos que compran sus amigos y cuyo trabajo curatorial simplemente es inexistente, pero no importa!.
    Hay tiempo para hacer otra cidade da cultura y llenarla con sus elecciones. Y así, el círculo de la gran idiotez se cierra. Y ¿qué queda fuera?
    TODO LO DEMÁS.

  23. Joder que bueno, si ya sabia yo que este personaje se estaba cavando la tumba.
    Enhorabuena Karmelo, menos mal que hay alguien con los suficientes cojones todavia para enfrentarse a esta especie de personajes que funcionan como la mafia.
    Y todos nosotros deberiamos aprender algo de esto.

  24. Es intersante, las críticas de Barro pueden leerse también como obras de arte: son la mierda que está por encima del oro. Este tinglado hace que sus críticas se deban entender como «superficies» de un negocio oculto.

  25. …y por eso es vergonzoso que se contrate a este tal Barro, de profesión “pseudoloquesea de arte” desde cualquier institución. La institución que lo contrata está gritando a los cuatro vientos ¡hacemos todo tipo de negocietes extra-artísticos con David Barro! Lo sabe todo dios. Ya sólo se cayan los que aún esperan hacer algún negociete cutre con él.

  26. Lo que veo es mucho resentimiento. David Barro se equivocó y eso puede pasar. Además se ha disculpado desde el primer día. Lo han dicho del propio Museo de Vigo. Si fuera un cobarde evidentemente no habría hecho esa crítica hacia el MARCO, museo con el que ha trabajado y seguro que va a seguir trabajando alguna vez. En este país parece que es delito tener un negocio y así nos va. Lo que me parece increible es que Karmelo Bermejo esté obsesionado con una crítica cuando el pretende ser el primer crítico. Seguro que, otra vez, quiere hacer de esta acción otra obra. Vaya originalidad la suya. Cuando tenga 35 años no quiero ni pensar loque se repetirá este chico. Por otro lado, me dice que la mayor parte de estos comentarios los escribe Pedro Maisterra, que es parte del juego.

  27. Pero si los críticos son todos iguales. Rosa Olivares juega con su amenaza constante de ser la mala malísima si no le pones publicidad, Fernando Castro hace 1.000 exposiciones a la vez, Javier Hontoria comienza a ser comisario porque familiarmente se ha catapultado como crítico de importancia en El Cultural, David Torres tiene un master, una revista, es crítico y comisario, los directores de museos públicos son jurados de concursos privados y públicos, y hay una cantidad ingente de críticos y comisarios ligados a ferias de arte, consiguiendo galerías para las ferias, muchas galerías se siguen viviendo con dinero negro, cada uno tiene su estrategia del sálvese quien pueda. ¿A alguien le extraña algo?

  28. Maisterra es un buen galerista que debería dedicarse a ser galerista en lugar de escribir aquí. Deja esta mierda y a Karmelo que tienes un buen proyecto y artistas muy buenos.

  29. Yo me quedo con los dos, con Barro y Bermejo, por lo menos son valientes. ¿Dónde está Iñaqui Martínez? Todos los que se callan son los que siempre quieren quedar bien y se mantienen en su silla. Prefiero la crítica auqnue falle y un artista aunque demuestre que es un crío que todavía no sabe encajar la críticas.

  30. Los galeristas tampoco. Antes eran más nobles. Llega informarse de como salieron los Maisterra y Valvuena de la galería Pilar Parra robando el mailing de coleccionistas y engañando y mordiendo la mano que les dio de comer. Ahora van de nobles y rigurosos. ¡Primero hay que ser persona!

  31. ¿De verdad no pagan a los artistas? ¡Pues lo primero de una empresa debería ser pagar a sus empleados! ¡A lo mejor los conceptuales no cobran y viven de las ideas!

  32. Y David Barro estará pensando ¡pero karmelo! ¿porque me mandas un burofax? si esto lo arreglabamos con una portada en dardo y santas pascuas

  33. Eso si que sería un final bueno para esta historia. Porque vaya tontería que se ha montado para no hablar de lo mala que es la exposición.

  34. Lo que pasa es que David barro queria el jacuzzi en su despacho de dardo y se sintió muy mal por no tenerlo él. No le gustó y se volvió loco. Ponedle un jacuzzi al director de dardo para que se de baños de sales con Castro Flórez

  35. Eso así Maisterra vende una puta pieza que no sea de Antonio Ballester!!!! Y le puede pagar a Karmelo, entre muchos otros que llevan meses sin cobrar. Jacuzzis para todos!!! Y con la documentación otra obra «original» de Karmelo y otra expo facilona para otro museo radical que de coba al pupilo de Sierra!!!

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