Como era previsible, la derecha institucional y sus medios de comunicación arremeten de nuevo contra Alfonso Sastre y contra II-SP. No bastaban las calumnias del ministro de Interior, el esperpéntico intento de ilegalización por parte del Tribunal Supremo, el acoso mediático previo a las elecciones, el fraude electoral…
Para los herederos del franquismo y los hijos políticos de los GAL, la disidencia real es algo que hay que eliminar a cualquier precio, por todos los medios legales e ilegales, legítimos e ilegítimos. Aun a costa de hacer el ridículo, que es el mayor peligro que corren los que abusan de un poder respaldado por el dinero y la fuerza bruta. Aun a costa del supremo ridículo que supone llamar «matón» a Alfonso Sastre por recordarnos algo obvio, algo que el Gobierno sabe mejor que nadie: que solo hay un camino para acabar con ETA, y que ese camino pasa por cambiar las condiciones objetivas que propician la aparición de nuevos militantes. Aunque mañana fueran detenidos todos los etarras, dentro de unos meses podría haber un nuevo comando listo para prolongar la espiral de la violencia. ¿Es una amenaza decir algo tan evidente? Parece ser que sí. Parece ser que la ancestral costumbre de los tiranos neuróticos sigue vigente en la «España democrática», y matar al mensajero produce un cierto alivio entre los que piensan con las vísceras.
Pero esta vez no han medido sus fuerzas. Alfonso Sastre les viene demasiado grande, les queda demasiado alto, y a los que lanzan hacia él su sucia baba, como a los que escupen al cielo, les caerá en la cara. Somos muchos y muchas -y no todos «radicales», como le gusta llamarnos al poder- los que vemos en Sastre un imprescindible referente de lucidez, valor y dignidad, un ejemplo a seguir en lo intelectual y en lo ético. Somos muchos y muchas los que, como Sastre, pedimos una solución pacífica y dialogada al denominado «conflicto vasco»; lo cual supone, por supuesto, el cese de los atentados, pero también el cese de las torturas (denunciadas insistentemente por la onU, Amnistía Internacional y más de cuarenta organizaciones de todo el Estado español), de la represión desmedida y de la llamada «guerra sucia», que no es más que otro nombre del terrorismo de Estado. Somos muchos y muchas los que, ante este nuevo intento de criminalización de la inteligencia que un Millán Astray habría capitaneado con fervor, diremos -decimos ya- «Yo también soy Sastre».
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Si cada vez que oyera hablar del «conflicto vasco» me dieran una peseta, ya sería rico, como la mayoría de los que vivimos en el «Estado español». Se que eso de votar a Batasuna en las europeas queda como muy rebelde y tal, pero yo creo que la gente, y especialmente en la CAV, está ya un poco harta de eufemismos tipo «socialización del dolor». La actitud del «y tu más» en referencia al GAL para contextualizar los atentados está más que gastada y amortizada. Si les sirve al PP y PSOE, pues vale, pero aquí en este democrático blog, ¿también?. Reconozco que la idea de ilegalizar un partido me espanta, pero analizando las consecuencias me parece positivo. De hecho, ahí está Aralar que defiende lo mismo pero sin pistolas, o es que hay que hacer una sanjurjada tras otra para conseguir la famosa independencia. Es un error plantear el susodicho conflicto como un problema entre el Pais Vasco y Madrid. El problema lo tiene ellos (los vascos) entre ellos mismos, ¿o no hay cerca de un 50% que pasa olímpicamente del tema? Por mi como si se la cogen con papel de fumar, pero resulta que el enemigo lo tienen en casa y si no, que miren los resultados electorales en Donosti.
A mi me gustaría que alguien me explicara cómo se dialoga con un tío que te esta apuntado con una pistola, ¿le pegas un tiro tú? ¿agachas la cabeza y se la chupas si hace falta? Tenía razón Josep Pla cuando decía que el vasco cuando es cerril se acerca a la esencia del castellano, y así nos va. Defendiendo lo indefendible porque queda guay en un blog de arte decir que vas contracorriente, me ofrezco a escribir un post llamado «Todos somos Mengele», que seguro que triunfa.
Ejercito ni vasco ni español
Para GUS-MAN:
Reparte hostias y bendiciones sobre el conflicto vasco, a la vez que confiesa que le aburre mucho hablar de este tema.
Ve positivo la ilegalización de partidos, (de izquierdas solamente, claro) y que sus argumentos quedan confirmados por los últimos resultados electorales en la CAV, cuando precisamente, la ilegalización de los partidos abertzales es lo que posibilitó el triunfo del PPSOE.
Dice que este blog defiende lo indefendible, cuando negando el manifiesto que él se difunde, defiende en definitiva lo que se condena al final del mismo… dicho en otras palabras, este tipo es un peligro social en potencia; si nos viéramos obligados a elegir en este conflicto, se pondría del lado del Millán Astray de turno, por mucho que se le atragante ahora la idea, pues este ataque a Alfonso Sastre es similar al que sufrió Unamuno del facherío patrio en 1936.
Para Santi Ochoa:
Vayamos por partes, lo que me aburre del tema es encontrar una y otra vez los mismos topicazos tanto por una como por otra parte. ¿A quien le interesa un partido que está resuelto de antemano? El verdadero drama vasco es la falta de vocabulario, ya nadie se lo cree y los que simulan creérselo es porque tienen intereses, y no precisamente altruistas, en el tema. Yo, desde luego, no me encuentro entre ellos.
Me parecen positivas algunas de las consecuencian de que ilegalicen Batasuna, creo que les hacen un favor al liberarles de tener tocar el sucio dinero del estado español. Y ahora resulta que el socialista Odón Elorza es alcalde de Donosti desde hace cuatro días y porque han ilegalizado Batasuna.
Lo que escribres a continuación: «Dice que este blog defiende lo indefendible, cuando negando el manifiesto que él se difunde, defiende en definitiva lo que se condena al final del mismo», no lo acabo de entender muy bien, pero, en cualquier caso, yo no estoy negando nada, lo único es que hago es expresar mi sopresa -espero que no te parezca mal- porque este blog, que pretende ofrecer un ángulo distinto de la realidad, en este caso, preste su espacio a reproducir, punto por punto, la retórica cansina de quienes justifican lo injustificable, es decir, la liquidación física de los enemigos políticos, esto es, el famoso método Boxheimer que se inventaron las SS en los años 30, la diferencia es que para la ETA la categoría de «enemigo político» va desde un militar hasta un pobre hombre que pasaba por allí.
Luego dices que soy un «peligro social en potencia» y estoy de acuerdo contigo menos en lo de «en potencia». También estoy seguro de que eres el típico tío que va por ahí presumiendo de que en el caso de un conflicto tú estarías en el lado de los buenos. Esta gente que lo tiene todo tan claro y tiene tanta fe en «La Idea» que no me extraña que sean los primeros en comprarse una ametralladora para defenderla.
Lo de Unamuno está bien traido, pero ¿quién es en este caso el que está gritando «Viva la muerte» y «Muera la inteligencia? ¿o es que hace falta tener un Nobel para pegarle un tiro a alguien por la espalda?
“El nuevo gobierno de Lakua es fruto de una decisión judicial, no de un cambio social” Miguel Sanz. presidente navarro.
Para referirse a que en las pasadas elecciones en la CAV aún siendo los votos más o menos los de siempre, la ilegalización de las opciones abertzale es lo que hizo posible la nueva mayoría parlamentaria.
“Euskal Herria es la cerveza y ETA la espuma. Cuando esa cerveza es fuerte, genera espuma. España tiene perdida la guerra con ETA”.
Xabier Arzallus, ex-presidente del PNV.
19.06.2009 Declaraciones a Info7 Irratia tras el último atentado.
Sí, es bastante probable que España tenga perdida la guerra contra ETA. Por lo menos mientras siga siendo un negocio para ambas partes.
Lo que chirrían son metáforas como la de la cerveza y la espuma. Afortunadamente, lo de poner bombas no viene de fábrica en el ADN vasco. Si no que se lo pregunten a Sabino Arana que, al parecer, lo único que le preocupaba era que en las fiestas del pueblo no se bailara agarrao. Y es que en Euskal Herria, trufadito como está de calles Sabino Arana, no se reedita al viejo patriarca porque sencillamente -y con buen criterio- les da vergüenza ajena.
«Donde un gobierno haya subido al poder por alguna forma de consulta popular, fraudulenta o no, y se mantenga al menos una apariencia de legalidad constitucional, el brote guerrillero es imposible de producir por no haberse agotado las posibilidades de la lucha
cívica.»
Ernesto Ché Guevara. La Guerra de Guerrillas. Capitulo Uno.
El que quiera entender que entienda.
Después de algunos días desde la última vez que escribí sobre la publicación de este manifiesto de apoyo a Alfonso Sastre me gustaría matizar algunas cosas, sin dejarme llevar por la ironía y el afán de provocar.
En primer lugar y después de leer varias veces el famoso artículo de Alfonso Sastre en Gara, creo que es evidente que es injusta la calificación de «matón» que le adjudica la llamada «brunete mediática», lo que dice sobre el dolor que se nos avecina no es una amenaza sino una obviedad que, por desgracia, se lleva repitiendo varias décadas. Por otra parte, es repugnante la cantidad de políticos y periodistas que han hecho carrera gracias a la ETA, como si estar en contra de los asesinatos fuera una profesión heróica y no una actitud de lo más normal.
Dicho esto, me sigue pareciendo muy triste que para defender a un tipo que por lo demás es un intelectual valioso se tenga que echar mano de los lugares comunes sobre el movimiento de liberación vasco, como si este tipo, en el fondo, no fuera más que un peón en la cansina lucha de los vascos entre si. Porque creo que es irrelevante si hay un 50% o un 40% de gente en la CAV que no está deacuerdo con los postulados abertzales, el caso es que existe un porcentaje importante de población que no comulga con el tema independista y no viven en Cuenca sino en Donosti. Si realmente hubiera una mayoría aplastante de independentistas en el País Vasco no estaríamos hablando de este tema. Pero, por lo visto, algunos piensan que la gente no nacionalista no tiene derecho a vivir, lo cual no es nada nuevo, de hecho, les llevan matando unos cuantos años. Lo que me parece excesivo es que los modernos de turno, léase contraindicaciones, les den cancha para que no los acusen de fachas como hizo Santi Ochoa conmigo en su primer comentario. Como si eso de matar fuera de izquierdas, cuando en este caso para la ETA y sus profesionales de uno u otro bando es simplemente un negocio sangriento.
Hola Gusman
Por tus comentarios deduzco que lo que quieres decir pero no dices es que ETA-Batasuna-Iniciativa Internacionalista quiere ahora utilizar al dramaturgo Alfonso Sastre como «banderín de enganche» para acumular apoyos entre intelectuales de izquierdas con la pretensión de que se cree un clima destinado a abrir un nuevo «proceso de paz» encaminado a conseguir la independencia del País Vasco.
¿Es así?
Saludos
Hola SoZ
Pues sí, es bastante clara la jugada de poner a Alfonso Sastre como cabeza visible del «nuevo partido» de los de Batasuna y parece que, de momento, les ha salido bien.
Pero lo más triste de todo en este caso es la pereza intelectual de quienes gestionan Contraindicaciones. No es tan difícil defender la postura de Alfonso Sastre ante la campaña de difamación de la «derecha mediática» sin caer en un corta y pega del penoso argumentario de Batasuna, que a su vez es un corta y pega del discurso que llevan manteniendo casi 50 años. Pero para eso hay que pensar un poco y parece que el cerebro de estos chicos es como la coca buena: brilla por su ausencia. Casi mejor que sigan haciendo articulitos sobre grafiteros con plantilla que se les da mejor.
Ah, y si no llega a ser por la ayuda de la CIA, la ETA jamás habría asesinado a Carrero Blanco o es que alguien todavía se cree que esta pandilla de mataos que sólo habían cometido un atentado anterior (el famoso Melitón Manzanas) les iban a dejar excavar un túnel durante un año a menos de 200 metros de la embajada americana. ¿Qué hizo Kissinger en España tres días antes del antentado? ¿porqué el embajador español en París no acudió a validar la detención de los etarras en suelo francés que cometieron el atentado y en cambio viajó a Madrid para hacerse Ministro de Gobernación, es decir, Interior? En fin…
Bueno pues que sepas que tu discurso es el mismo que el de la derecha más reclacitrante:
http://www.abc.es/20090629/nacional-terrorismo/sastre-como-gancho-para-200906290213.html
Una campaña orquestada por la derecha más rancia y que intenta deslegitimar de paso a la Coordinadora Antifascista de Madrid:
http://www.abc.es/20090622/nacional-terrorismo/coordinadora-antifascista-madrid-aporto-20090622.html
Y como has podido leer también la okupación, maravilloso criminalizar a esos grupos ¿no te parece?
Y que al final y al cabo ese discurso que tu compartes es el que fundamenta un ataque directo a la libertad de expresión, que es de lo que se trata este apoyo y no de dar cobertura a la banda terrorista. Me parece que tu ataque contra Contraindicaciones no es muy inteligente, y que pretendiendo exponer una postura crítica lo que haces es engrosar el rebaño. El de Abc por ejemplo.
Si como antes decías (aunque tu discurso va y viene y se retracta y contradice) la campaña contra Sastre te parece exagerada y defiendes la libertad de expresion de lo obvio, y en el texto de apoyo de la campaña no se ve por ningun lado ese jerga cansina de la izquierda abertzale (señalala si no) creo que deberías justificar tu mala baba hacia esta página con otros argumentos más inteligentes. Que parece que puedes hacerlo.
Saludos
Perdón, recalcitrante
Vaya que buen giro da este hilo de discusión… resulta que lo verdaderamente triste es que para criticar posturas independientes haya que convertirse en abanderado de la reacción.
Parece mentira que a estas alturas haya quien continúe esgrimiendo argumentos favorables al terrorismo nacional-socialista. La izquierda en españa lo ha secundado como postura aceptada y aceptable siempre heredada del dicatado soviético y la tradición revolucionaria republicana que sólo provocó un millón de muertos en la Guerra Civil.
En las décadas posteriores siempre perduró el afán revanchista y las nuevas generaciones de la izquierda española, encabezadas por el actual presidente del gobierno, ya han perdido la referencia soviética pero repiten eslóganes vacíos y lugares comunes de sus dirigentes que los llevan a la situación de paranoia letal.
El simple hecho de que alguien defienda la vida y la libertad supone para la izquierda una batalla por la consecución de la muerte y el totalitarismo. Los argumentos por la prosperidad y la paz, provocan en la izquiera el anhelo del caos y el enfrentamiento.
Nunca pensé que alguien en su sano juicio se atreviese a argumentar nada a favor de la presencia política de elementos asesinos disfrazados de lo que se quieran disfrazar: Nacional-socialismo separatista, Antinacionalismo romántico decimonónico desvirtuado, Republicanismo revivalista de las checas asesinas, nombres como A. Sastre, Carod Rovira o Ibarreche y Urcullo.
Dejad de drogaros y volved a estudiar la cartilla nº1.
Saludos.
Hola a todos,
pasaba por aqui y me he parado a leer esta discusion que teneis. No se de que lado posicionarme, era partidario del dialogo (3 veces son mas que suficientes) y contrario a la ilegalizacion (cuando el dinero que se le da a un partido se utiliza para matar gente… malo), pero como la gente de Batasuna y su entorno no tiene los cojones de decirle a ETA que deje de matar gente (porque han generado un monstruo y los dirigentes de ETA de hoy en dia no se parecen ni en ideales ni en nada a los dirigentes de antaño; no hay mas que ver lo que piensan los dirigentes historicos que estan encarcelados, que son los primeros que dicen que ya esta bien de tanta violencia) y que las cosas se arreglan dialogando pues… punto y aparte.
Aqui no se trata de apoyar a Sastre o no; se trata de acabar de una vez con la violencia (y los que la justifican, quien quiera que sea) en la politica vasca. Todo lo demas es demagogia pura y dura.
Saludos
…y por cierto, que una idea que he tenido se parezca a una idea que ha tenido alguien de otro signo politico no la hace menos buena, la hace mejor para el debate.