La revolución de la plaza de Tiananmen de Beijing (Pekín), que empezó un día 15, de abril de 1989, acabó a los dos meses ahogada en sangre por el gobierno, que mató a 180 manifestantes, ninguno en la propia plaza, que fue antes desalojada voluntariamente por ls manifestantes.
Tras un año de represión del gobierno y otro de recuperación del movimiento, en la primavera de 1991 y hasta 1992, sus artistas extendieron la CULTURA DE CAMISETAS(wenhuashan) , que hace referencia a las camisetas que tienen un mensaje político o social, normalmente irónico o cómico y que tuvo un gran auge, sobre todo en la capital, donde muchos de estos diseños criticaban al gobierno o contenían mensajes sociales transgresores para la época.
KONG YONGQIAN, su diseñador más destacado lanzó en la primavera de 1991 camisetas de «no te tengo miedo», «estoy cabreado, apártate de mi vista», «harto de todo!» y una muy popular de un gato llorando encima de «Gato Negro, Gato Blanco, no importa si atrapa ratones» refiriéndose a la famosa consigna pragmática del gobierno chino, que aquí se apresuró a difundir Felipe González.
El sarcasmo e ironía de estas camiseta culturales que a menudo rayaba en el humor negro, resultó ser un éxito de público fuera del control del gobierno, que molesto por todas esas «vallas publicitarias humanas» caminando por las calles, prohibió su venta al final del verano. Kong fue enseguida multado y detenido, pero liberado ese mismo verano. Entonces los chinos, en un movimiento esencialmente subterráneo de la cultura, comenzaron a pintar a mano sus propias camisas en blanco, un estilo de protesta que llamaron «karaoke visual»
Kong fue acogido en 1992 con los brazos abiertos en el mundo capitalista por el artisteo de Australia y EEUU, que no les duró demasiado quizás este nuevo ejemplo de victima de dictadura comunista, pues volvió a Beijing en 1994 y se hizo rico rápidamente comerciando con las camisetas, desplegando después con la red el negocio por todo el mundo.
Escuchen todos, no me pueden engañar.
Estoy furioso, déjame en paz.
No me va a pasar nada.
¡Fenomenal! – ¡Qué chulo! – ¡Qué paleto! – ¡Qué Guay! – ¡El tonto de culo!- ¡Qué guapo! – ¡Es inútil!- ¡Qué desastre! – ¡Qué remedio! – ¡Què fastidio!
¿Qué debo hacer: seguir con mi trabajo de oficina o poner en marcha un puesto callejero?
Fotos de camisetas de KONG YONGQIAN escaneadas del libro IN THE RED. Geremie R. Barmé. Columbia University. New York. 1999