Charity, Democracia.
La desobediencia civil se extiende.
Mientras algunos ayuntamientos como el de Madrid impone multas de 750 euros por buscar comida en los contenedores de basura o en Girona se cierran con esos contenedores con candados, los medios de comunicación criminalizan (llamándolo robo) los actos de expropiación popular llevados a cabo por el SAT (Sindicato Andañuz de Trabajadores) de alimentos básicos en grandes superficies (Mercadona -cuyo presidente dijo aquello de «menos derechos y más deberes»- y Carrefour) con el objeto de entregarlos en bancos de alimentos. Los alimentos expropiados suponen una mínima parte de los desechos diarios de estas grandes superficies, esos alimentos que acaban en contenedores de los que no se pueden coger nada porque te multan o están candados.
Hace horas escasas el Ministerio de Interior ha cursado la orden de detención de los aproximadamente 400 participantes en las mencionadas expropiaciones. !Qué eficacia cuando lo comparamos con otras situaciones!.
En un proyecto de Democracia alrededor de los «espigadores» que buscan comida caducada en los contenedores de 2007, decíamos que los ciudadanos que diariamente esperan a las puertas de las grandes superficies la basura del día eran la imagen de los consumidores fracasados (expresión acuñada por Bauman) expulsados definitivamente del único juego de la ciudad: el consumo. Hoy día ya ni siquiera se soporta su presencia y se les persigue con la intención de mantener una ilusión a la que cada día se le abren más los costurones.
Meses atrás, Rafa compartía con nosotros lo que se puede considerar una acción precursora de esta que hoy lleva a cabo el SAT.
Echad un vistazo al proyecto Excedentes/Excess http://www.excedentes-excess.org, de José Luis Bongore y Beatriz Marcos en Madrid, junto con Brooke Singer y Ricardo Zúñiga en NYC. Versa sobre la misma temática y propone que se eleve un proyecto de ley para que la donación de comida no sea penada.
Bueno, lo de las multas por recoger comida de los contenedores de basura, de momento, parece no lo están haciendo efectivo, al menos desde la experiencia con Comida Basura,http://comidabasurablog.wordpress.com/
Cuando salimos a «espigar» a los contenedores para reciclar alimentos, nunca nos han multado. Son mucho peores las trabas e impedimentos de las grandes superficies para que no puedas acceder a sus excedentes. Sin embargo con pequeñas y medianas superficies ya estamos consiguiendo que donen sus excedentes para las comidas populares que organizamos.
¿Pero estamos reivindicando en serio el derecho a vivir de la basura? Cada vez flipo más con la diarrea mental de la peña. No creo que así se subvierta el sistema económico, así nos hacemos directamente dependientes de él. ¿Cómo que negociar con los centros comerciales para que nos den su excedentes? ¿Qué acuerdo de paz es este? No entiendo nada, parece que la solución sea vivir de las sobras de la mesa del poder.
Totalmente de acuerdo con el último comentario; ¿Negociar con centros comerciales, pedir proyectos de ley? Hay que buscar la confrontación, no evitarla. El sistema legal en sí mismo no es legítimo.