Tristemente sorprendido en Sevilla. En la manifestación, eso si con menos pancartas de partidos y sindicatos que en otras, estaba la gente de siempre, a pesar de ser una convocatoria a priori diferente, la cabecera estaba ocupada por la gente de «Corriente Roja».
Así pues, a pesar del maquillaje, una manifestación marxista-leninista más, sin autocrítica y totalitaria. Poco interés.
Como rectificar es de sabios, hay que decir que a medida que avanza la cosa está mejorando bastante. En Sevilla las concentraciones en la Plaza de la Encarnación están siendo un éxito, a ver si poco a poco se va incorporando más gente y a ver también si continúa así y ningún grupo capitaliza o expropia la protesta.
Un saludo y siento mi desconfianza inicial.
Tristemente sorprendido en Sevilla. En la manifestación, eso si con menos pancartas de partidos y sindicatos que en otras, estaba la gente de siempre, a pesar de ser una convocatoria a priori diferente, la cabecera estaba ocupada por la gente de «Corriente Roja».
Así pues, a pesar del maquillaje, una manifestación marxista-leninista más, sin autocrítica y totalitaria. Poco interés.
Como rectificar es de sabios, hay que decir que a medida que avanza la cosa está mejorando bastante. En Sevilla las concentraciones en la Plaza de la Encarnación están siendo un éxito, a ver si poco a poco se va incorporando más gente y a ver también si continúa así y ningún grupo capitaliza o expropia la protesta.
Un saludo y siento mi desconfianza inicial.