La Jovencita es una crisis de coherencia que sacude los intestinos de la sociedad mercantil durante su cuarto menguante, Respode al imperativo de una mercantilización total de la existencia en todos su aspectos, a la necesidad de hacer que nada quede ya fuera de la forma-mercancía en eso que aún se llama de forma eufemística, las «relaciones sociales»