Este viernes, día 9 de octube, en el marco de Evento 2009, en la ciudad de Burdeos, se presentará el proyecto de Democracia titulado Ne vous laissez pas consoler (No os dejéis consolar). Para la realización de esta acción, Democracia ha colaborado con los Ultramarines, los ultras del equipo de fútbol Girondins de Burdeos.
La verdad es siempre revolucionaria
El proyecto consistió en la inserción de sentencias de carácter político fuera de contexto, en un espectáculo deportivo (en este caso el partido entre el Girondins de Burdeos y el Stade Rennes), que cuestionan la lógica misma del espectáculo. Estas citas fueron exhibidas en diversas pancartas mostradas por los ultras y en merchandising del club (bufandas, banderas, camisetas) intervenido.
No tenemos nada, salvo nuestro tiempo
Los ídolos no existen
Desde la crítica debordiana el simple hecho de mirar es «malo», «el hombre cuanto mas contempla, menos es» dice Debord. Pero Jacques Ranciere ha querido cuestionar este concepto fundamental en la crítica de la sociedad del espectáculo, a traves de su idea del «espectador emancipado»:«El efecto del idioma no puede ser anticipado. Exige espectadores que sean activos como interpretes, que intentan inventar su propia traducción para apropiarse de la historia por si mismos y hacer de ello su propia historia. Una comunidad emancipada es de hecho una comunidad de cuenta cuentos y traductores. Soy consciente que todo esto pueda sonar a eso: palabras, meras palabras. Pero no tomaría esto como un insulto. (…) conociendo que las palabras son solo palabras y los espectáculos solo espectáculos puede que nos ayude a entender como las palabras, historias y performances pueden ayudarnos a cambiar algo en el mundo en que vivimos.
Ranciere se refiere al espectador del arte, al del teatro, al de las performances ¿pero son estos espectadores mejores que los espectadores del fútbol? Por que si estamos hablando de espectadores enmancipados, activos, esos son los ultras, que defienden su propio territorio, conscientes de su lugar en la arquitectura de la expectación, que en el caso del fútbol es el fondo sur , ellos son la tribune populaire (la tribuna popular). Los ultras son organizaciones autogestionadas de carácter popular, lo cual es en si una postura política, opuestas al fútbol-negocio -¿a la expresión más contemporánea del espectáculo alienante?-, que hacen presentes sus reivindicaciones de clase y comunidad a través de las banderas, los cánticos y las pancartas.
La naturaleza de la colaboración entre Democracia y los Ultramarines ha sido buscar un lenguaje común (recuperar palabras) con el que representar una ideología compartida. Cuestionar al espectáculo en el corazón del espectáculo.
http://nodo50.org/bukaneros/
bueníssimo proyecto!!!!!!!!
está increíble, muy simple y tiene todavia total eficácia de difusión «anonima» en una partida de «futbol-negocio».
Lo más interessante es justamente la intervención en este estado massivo de la partida, que las mensajes siempre se quedan como «subliminares», tanto para los espectadores del estadio cuanto para quien en su casa assiste la partida en la tv.
un trabajo que muy facilmente puederia ser comissionado para la copa del mundo en africa::::::>>>
felicitaciones Democracia!!! por más unos de los trabajos que ultrapassan las «problemáticas de lo circuito artistico»
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muy interesante el proyecto. como todo lo que hacéis por aquí.
con lo único que no estoy de acuerdo es con que los ultras sean organizaciones opuestas al fútbol-negocio. lo cierto es que no conozco el funcionamiento de los ultramarines, pero en españa los ultras están «manejados» por las directivas de los clubes, viajan a gastos pagados cuando el equipo juega fuera y dan un apoyo incondicional a los jugadores (el foco del negocio) aún cuando hay división de opiniones en la grada… siempre se nos olvida (o nos quieren hacer olvidar), y no me refiero ahora a este trabajo, que la relación fútbol y política es íntima. y si esto es así, es porque hay intereses económicos entre medio…
saludos.
En los Bukaneros (los ultras del Rayo Vallekano) encontrarás un ejemplo de ultras españoles contra el futbol-negocio, el link a su pagina está en el primer comentario
Si ya existe la imagen de Bukaneros, o la de las Brigadas Amarillas, o la de los Biris, o la de los Riazor Blues, o las del Olympic de Marsella, para qué la imagen de Democracia, se preguntó un balón de futbol.
Propuesta para la próxima capitalización artística:
«Democracia siente conmiseración del pueblo»
Nada de capitalización, esto es una colaboración, los Ultramarines decidieron hacerlo y conocían perfectamente nuestro trabajo, ellos decidieron, me parece una falta de respeto hacia los Ultramarines, ya que da a entender que han sido manipulados o que no tienen capacidad de decisión, cuando ha sido algo en lo que han querido participar que se ha desarrollado colaborativamente y de lo que son protagonistas principales. Ellos mismos explicaban muy bien su postura en la hoja volante que reparten en todos los partidos: otra forma de reivindicar su territorio. Ni victimismos, ni conmiseraciones. No entiendo este comentario, pero me parece lleno de prejuicios
Si, hay gente por ahí que está llena de prejuicios, envidiosa, cobarderl y pecadorarl, jaaarll….
Ni por todo el oro de Bonanzarl se venderían los Ultramarines a la capitalización, fistro, que eres un fistro. O no le leiste ahí arriba, colaboración chaval… colaboración.
Anda macho date una ducha fría que estás más atacado que la nave de Star Trek.
fistro!!!
No se refuta una capitalización tras los enunciados: «ellos han querido» «ellos lo han decidido» «ellos han colaborado».
Pruebas hay, en esta vida, por todos los lados. Colaboradores también. Como si el capitalismo hubiera llegado a lo que es hoy, sin que nadie lo hubiera deseado, sin que nadie haya trabajado «por él». Como si no existieran los capitalistas o los fascistas, sólo gente «obligada» a serlo y sufrirlo.
Se quiso pensar aquí, aportando la información de Bukaneros, sobre un arte cuyo gesto aparece en un espacio que ya se enuncia previamente como político, siéndolo verdaderamente, y que sus protagonistas ya se encargan de hacerlo artísticamente. Ahí quedan las pancartas de Las Brigadas Amarillas.
Prejuicio. Una palabra capitalizada más, por aquéllos que al dispararla imposibilitan la experiencia entre iguales. Como si todo el mundo hablara sin pensar, como si viera sin ver. Como si la experiencia no fuera posible.
http://img263.imageshack.us/img263/7916/foto0607rayoleganes3kh3.jpg
Yo pense que ultramarines era solo una torcida organizada de un equipo de futbol, pero creo que es otra cosa tambiém no?
El problema aquí es que cualquier trabajo artístico que se roce con lo político o lo social puede ser acusado de explotación, de utilizar con fines espurios, reificando como meros recursos, las expresiones o experiencias de personas y colectivos. Es cierto que esta situación se produce en demasiadas ocasiones, pero eso no invalida todas las iniciativas producidas en este ámbito, o ¿pretenden algunos devolver al arte al redil de la autonomía?
En cualquier caso, respecto al presente trabajo parece claro que hay una relación simétrica de colaboración y unos objetivos comunes, perseguidos tanto por parte de Democracia como de los Ultramarines. Por otra parte, éstos últimos operan como agente de interrupción del sistema real de la explotación futbolística espectacular, poniéndose los primeros al servicio de estos intereses y facilitando su extensión al terreno cultural que, por otro lado, esta atravesado por semejantes circunstancias en relación con la explotación. ¿Acaso los Ultramarines están capitalizando su colaboración con Democracia para legitimarse a través del arte? No parece razonable, como tampoco lo es la acusación contraria.
Muy oportuna la reivindicación del acto de mirar.
Que no nos convenzan de que constituye una actividad pasiva.
Me imagino que los autores son lectores de Bretch:
Contra la seducción
No os dejéis seducir:
no hay retorno alguno.
El día está a las puertas,
hay ya viento nocturno:
no vendrá otra mañana.
No os dejéis engañar
con que la vida es poco.
Bebedla a grandes tragos
porque no os bastará
cuando hayáis de perderla.
No os dejéis consolar.
Vuestro tiempo no es mucho.
El lodo, a los podridos.
La vida es lo más grande:
perderla es perder todo.