Pincha en el siguiente enlace para ver el trailer de WOPPOW SER POLÍTICO ES COMO UNA GRAN TENDENCIA DE MODA, un documental de UBERMORGEN.COM sobre la moda de los piratas somalíes.
El diseñador de moda francés Woppow, viaja a su país natal: Kenya. Allí encuentra la inpiración necesaria para su próximo proyecto de Art Couture. Influenciado por la superficialidad de los informes de los medios de comunicación sobre los misteriosos piratas somalíes, empieza a copiar el estilo de vestir de los piratas y de los pescadores locales, creando la nueva línea «Mzungu por Woppow» (pret-a-porter) y una colección para niños llamada «Woppow SHIFTAZ».
Hoy en día que el ojo mundial se concentra en los piratas de Somalia, el atún rojo y el terrorismo, la innovadora campaña de marketing de Woppow utiliza la piratería para contextualizar mercancías de lujo junto a la explotación de los trabajadores africanos.
WOPPOW from UBERMORGEN.COM on Vimeo.
Según su propias palabras:
«Los piratas somalíes están alcanzando el estatus de héroes populares. Aunque en realidad son pocos los que toman parte en los secuestros, la piratería es un negocio tribal: los familiares facilitan las negociaciones,se desarrollan transacciones en moneda extranjera y se llevan a cabo construcciones u otros trabajos que son pagados por las grandes sumas de dinero que fluyen hacia un área que ha sufrido los estragos de la guerra civil desde hace casi 17 años. Los somalíes obtetien hasta 100 millones de dólares gracias a los rescates exigidos por los piratas frente a sus costas, mientras que europeos y asiáticos ganan alrededor de 300 millones de dólares al año con la pesca furtiva en las aguas somalíes y el depósito ilegal de residuos nucleares en la costa.
En contraste con sus silenciosos abordajes y posterior desaparación, tras haber mostrado una elaborada paciencia durante las negociaciones de los rescates, su moda lo es todo salvo silenciosa. Un estallido de colores brillantes en la parte superior se mezcla con el camuflaje o un simple color de fondo más tradicionalmente dispuestos . Diferentes turbantes de algodón o ropas de lino multicolor completan su aspecto estándar, confiriéndoles un look muy moderno. […] Lo más importante, a un verdadero pirata somalí nunca se le ve sin la batería de armas bien y sutilmente ordenada, que por lo general, lleva sobre el pecho, en posición horizontal sobre el cinturón o en la espalda a distintas alturas: un AK-47, una pistola semiautomática TT-30, granadas de mano RGD-5, o F1 y un RPG (lanzacohetes antitanque portátil de origen soviético).
[…]Partiendo de las «Utopías Piratas» de Hakim Bey nos involucramos en una narración de la épica anarquista de las tribus piratas contemporáneas capaces de las operaciones más modernas y agresivas. Los grupos piratas actúan en zonas autónomas temporales con GPS, lanzadores de cohetes y dispositivos de comunicación de última generación para negociar y recibir dinero del rescate arrojado desde un helicóptero, para luego desaparecer en la nada de la vasta y peligrosa costa somalí. Estamos hablando de una red y de una obra de arte (network and artwork) de gran estilo basada en la cooperación tribal, en oposición a los grupos aislados de la sociedad tribal tradicional.
Creo que los piratas somalíes servirían muy bien como reparto imaginario de una narrativa digital (1), sus motivos, sus personajes, su tecnología y saber hacer, su coraje, cortocircuitan el sistema… todo mezclado con microculturas específicas y complejos lenguajes visuales. Si la ONU da la aprobación para luchar contra los piratas en tierra, sólo llevaría a la muerte de somalíes inocentes. Ellos no pueden diferenciar a los exploradores del mar de los somalíes ordinarios, que se visten igual, con estilo y locales, inteligentes y rurales y tribales y enojados«.
(1) La narrativa digital explora la idea de cómo la comunicación y el contar historias (storytelling) está influyendo y siendo influido por las nuevas tecnologías emergentes.
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