La calle es mía ¿Quién manda en Internet?

A medida que el pastel crece también lo hacen las diferentes estrategias de control. Los continuos intentos por parte de la industria cultural para consolidar mecanismos disciplinarios en la red no se dirigen exclusivamente a lo económico, al disciplinamiento mercantil de la propiedad intelectual, en última instancia lo que se conseguiría ensayar con su implementación serían mecanismos de sujeción cultural, de producción de subjetividad que, a la postre, podrían ponerse al servicio de distintos intereses, aparte de aquellos propios de la industria cultural.
Ahora, en un panorama en el que los monopolios de facto copan el mercado de las infraestructuras en internet (véase el caso de Telefónica en España), las compañías propietarias de estas infraestructuras hacen valer su poder y nos advierten: «Cuidado, que todo esto nos pertenece».
En este contexto «Hay ya un pronunciamiento judicial sobre el asunto en Estados Unidos. El 6 de abril, un tribunal sentenció que el Gobierno no tiene derecho a obligar a las empresas de telefonía y cable a que sean neutrales a la hora de tratar a sus clientes.»
Más en el País: http://bit.ly/cUNAVE

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